¿Cómo sabes si algo es bueno o malo? La realidad es que la mayoría de las cosas que hemos aprendido no nos permiten ser libres. Libres para pensar y sentir. Etiquetamos, rotulamos, definimos. Todos son conceptos, percepciones. En el mismo instante en que abrimos nuestros ojos nuestra mente rotula, pone una etiqueta. Lo hacemos con las personas, con los sucesos, con los objetos, con la salud, con nuestro cuerpo, con nuestro entorno, con la naturaleza, con todo lo que podemos ver y tocar.
Cada definición proviene de un campo de energía que hemos desarrollado desde pequeños. Un campo de conocimiento donde hemos aprendido lo que es, supuestamente, bueno o malo. Digo esto porque: “¿Para quién es malo o bueno?, ¿quién ha establecido que si nos tropezamos con una piedra eso es malo y si ganamos la lotería es muy bueno?”. Busquemos en lo profundo de nuestro Ser la respuesta. ¿El Poder que te ha creado es el que lo determina o es tu ego y el de toda la conciencia social el que ha dicho cómo son las cosas? Ahondemos en esta idea y obtengamos la sabiduría necesaria para poder darnos cuenta que las etiquetas permanecen en nuestra vida para hacerla penosa y desdichada.
Si tan solo pudiéramos vivir los eventos sin rotularlos. Si tan solo pudiéramos apartar los aprendizajes que nos hicieron ver la vida desde un prisma limitado. Todo es completo y perfecto. Todo lo que sucede es maravilloso. Las cosas, los hechos simplemente son. Ni buenos ni malos, solo son. Tú no eres gordo o flaco, solo eres.
Te invito a que mires la vida a través de la verdadera realidad y dejes de definir todos los acontecimientos. Esto te ayudará a sentirte agradecido. Si cada vez que algo ocurra dejas de pensar: para elegir sentir experimentarás bienestar.“¡Oh!, esto es muy malo” “¡Oh!, todo se está moviendo, esto es energía materializada, simplemente existe, simplemente es y me ayuda a evolucionar”,
Siéntete agradecido. En lo profundo de tu corazón, alejado de tu mente, sabes que lo que está ocurriendo es extraordinario, esconde una energía sutil asombrosa que obra milagros y que te hará muy dichoso.